martes, 22 de diciembre de 2015

EL 27 DE MI CORAZÓN


Desde la antigua zona C del Jalisco vi levantarse al número 27 del Atlas, justo en el límite del área chica como él siempre los ha buscado en su carrera. Lo vi girar la cabeza y golpear el balón con la misma para esconderla del portero y los defensas. Era el verano del 99 y disputábamos una final ante el Toluca del Cardozo histórico que eran favoritos, pero que los 20 años de vida de Rafael Marquez aun escribieron uno de los momentos más gloriosos de mi vida en el futbol. Puedo ver mil veces el video de ese gol.


Sin embargo nuestro número 27 tuvo que partir y enfundarse el 4 para hacer una carrera de éxito en las europas. Desde acá nos hizo vibrar a los que lo vimos nacer en los colores rojinegros pero ahora coleccionando trofeos internacionales y capitaneando a la selección del país. Fueron largos años de verle barrer y correr y nunca dejar de buscar ese primer poste para hacer goles. Fueron años lejos del terruño donde conquistó logros maravillosos que siempre gozamos quienes lo vimos nacer con el número 27 en Colomos.


Cuando partió el 27 y se fueron algunos de los canteranos que te rodearon se formuló la idea de que en algunos años más volverían a formarse los niños héroes de aquel mágico 1999. Honestamente siempre tuve miedo del asqueroso futbol de los billetes y sabía que no vendría Marquez a casa sin antes pasar por el América de los billetes, o el Tigres de las estrellas y peor aun con el odiado rival que también en algún momento buscó a nuestro 27. Aun así pasados los años Marquez volvió al país y los billetes hicieron lo suyo para que se fuera a un León distinto con quienes los logros continuaron.

Siempre entendí el que no volviera a casa y se fuera al León, en esos años nadie en su sano juicio que practicara el deporte profesional quería jugar a un Atlas sin dinero, sin pagos, con problemas dentro y fuera de la cancha y sobretodo al filo del abismo... el futbol es así... Aun así seguí de a poco el andar del Kaiser en las canchas mexicanas y aunque el León me importa no menos que un cacahuate garapiñado me dio gusto verlo nuevamente levantar copas.

Han pasado ya más de 15 años de la partida del 27, desde aquella noche mágica de la zona C en que mi garganta se hizo añicos. Hoy por fin nuevamente se cumplió el sueño de millones de rojinegros, volver a ver al 27 escondido en un 4 nuevamente con los colores de mi corazón. Los más ilusos reclaman tonterías, los ajenos hacen mofas, los más fieles ponen altares alrededor de Marquez, yo solo soy muy feliz de verlo nuevamente en casa.

Es un hecho que Atlas está tan lejos del campeonato como el peso del dolar, el Kaiser no es la solución a nuestros problemas, tenemos decenas de años de incertidumbre, malos manejos y contrataciones terribles que nos respaldan. Pero este año seré feliz de ver de vuelta al 27, no me importa si es para regarla, para que lo expulsen o para lo que sea, con que lo haga una vez más con esos bellos colores me conformo, con que busque ese primer poste letal.

Gracias Rafa por estar con Atlas de nueva cuenta, gracias por nunca haber pisado al club enemigo, gracias por esa noche mágica de 1999 que siempre guardaré en mi corazón.

lunes, 7 de diciembre de 2015

ASÍ FUE MI NOCHE CON NOFX



El viernes me levanté de mi cama con un inquieto sentimiento de cosquilla mental y no era para menos, por la noche podría ver nuevamente a una banda que marcó mi vida de juventud alocada. Y aunque es cierto que esa vida loca cada vez se torna más regular y poco aventurera ante tanto acecho de la edad, la modernidad y las lesiones en las rodillas aun guardo en mis músculos las fuerzas para punkrockear como chaval en concierto gratuito de explanada.

A eso de las 4 de la tarde y tras una carne en su jugo de antología llegué a la prueba de audio de NOFX sin NOFX, punto a favor del punk, aun nos resistimos a las exhaustivas, monótonas y horribles pruebas de audio. Se encargó de esto la gente de la banda y alcancé a percibir cambios de cuerdas y un exagerado bajo de nivel de luz led ya que los viejos músicos no quieren sudar como pollos pechugones, punto en contra del punk pero a favor de su salud.

Antes del show me tomé la suficiente cerveza para calmar las ansias y refrescar ideas y pasos de baile, no comulgo con la onda esa de no tomar antes del show. Luego luego ya me querían rodar las lágrimas al llegar al lugar y ver un hermoso letrero en puerta indicando el sold out del evento, ¡en tu cara Guadalajara de las mismas bandas! Además ver a tantos amigos con la misma enfermedad y fanatismo por estos californianos cuarentones también me estremecían las ideas y la excitación previa a dar un show que quedaría en mis muelas para siempre.

Arriba del escenario fue una comunión de risas, música y beberecua con nostalgia y energía. Me gasté la garganta para dar el ronco aliento de años de sueños y anhelos alrededor de lo que NOFX provocaba en mi vida desde tiempos noventeros y hasta la fecha. Es obvio que ya no soy el fan de antes pero les tengo un agradecimiento eterno guardado por darle sentido a lo que mi vida quiso que hiciera en aquellos años. La crítica a los NOFX por su extinto sentimiento punk es muy grande pero personalmente yo he fallado mucho más, He sido un remedo de punk con tarjetas de crédito y deudas honorables lejos de la profecía que Linoleum supuestamente me deparaba.

Ya después de tocar tomé el lugar de los que padecemos de las rodillas y el miedo al slam que veinte años después para mi luce tan difícil como si yo fuese Billy Elliot alineando para la línea defensiva de los vaqueros de Dallas. Nuevamente quise llorar al ver el recinto lleno hasta las fauces; con el imposible caminar de los treintones y el baile intenso de los mas chavos al frente. Por fin se llegó la hora de ver a NOFX a las 11:30 como lo anunciaba la hojita de papel en el camerino, punto malo para el punk, ya no podemos ni ser impuntuales.

Y así entonces después de una entrada no menos que espectacular e hiriente tras más de 16 años de espera, el gordo Mike y sus amigos lo estaban haciendo de nuevo. Y así entonces cuando sonó "Stickin in my eye" no pude evitarlo y rodé las de cocodrilo por la emoción así sin que nadie me viera. Curiosamente la primera vez que los vi no lloré y me dediqué a volar y volar en el slam locuaz de noviembre del 99. Esta vez si lloré un poco y creo que fue que por un instante de mi vida era completamente feliz. El gordo Mike y el Hefe no lo sabían pero estaban haciendo mi momento tan feliz como hace muchos años no sucedía.

El viernes pasado cumplí el sueño de tocar con ellos, a los punks de california creo que les importa un poco menos que una cuerda cuarta de bajo. Guadalajara demostró que estamos hechos a la altura de eventos grandes cuando se nos ofrecen cosas atractivas. A mi al día siguiente la nostalgia de amistades que tardaré en volver a ver, el no haber conseguido acercarme lo suficiente al gordo Mike y una cruda de punkrocker me curaba mi sábado de treintón punk de a peso. Las lágrimas que me limpié la noche anterior se las dedico a mi vida punk adolescente y le pido perdón por abandonarla pero me dejé alcanzar por la edad y la sensatez.

Gracias NOFX por hacerme un chiquillo una vez más, aunque sea por una noche, aunque sea con deudas en el banco, aunque sea el buen pretexto para llorar de emoción otra vez...





lunes, 30 de noviembre de 2015

NOFX 17 AÑOS DESPUÉS




Todos tenemos un minuto para NOFX, incluso si no te gusta el punk tienes un minuto para NOFX, incluso si no tienes sentido del humor tienes un minuto para NOFX, aunque no seas apolítico se tiene un minuto para NOFX. Una ciudad tan mocha y tan poco punk siempre tendrá un espacio para NOFX.

17 años después Guadalajara recibirá la visita endemoniada de la banda punk rock más representativa de California. Los que hace 17 años estuvimos ahora estamos lejos de aquellos ideales y costumbres de juveniles punks desenfadados pero en la cabeza aun tenemos esa gran experiencia y planeamos revivirla. Los otros nuevos fans de la banda tendrán el privilegio de gozar el show hilarante y energético que esta banda suele aterrizar en el escenario.

Siempre es un volado, no sabemos el estado de alcoholismo que Fat Mike y compañía nos tengan reservado para esa noche y con ello que pueda suceder en el terreno de juego. Si algo caracteriza los shows de esta banda es el hilarante y desenfrenado derroche de humor y energía salpicado de éxitos y alcohol en tono bacanal. Los integrantes saben comportarse como chiquillos en borrachera de secundaria y avientan carreta a diestra y siniestra convirtiendo el entorno en un albur constante de peda burda. Siempre es un volado saber que tanto y tan lejos llegarán estos tipos en busca de un show.

Hace 17 años las luces se apagaron y la guitarra de Melvin y la batería en redoble de Smelly daban paso a  "Its my job to keep punk rock elite" canción con la que abrieron el show y se llenó de punk el Hard Rock por una noche eterna. Afuera el mismo número de personas urgían al inmueble abrieran las puertas para por lo menos escuchar a lo lejos los acordes de NOFX como sonaban en un romántico sold out. La disquera como premio de consolación regaló cintas compiladas de la Fat records a los que afuera se quedaron sin show, una noche redonda.

En ese show del 99 fui de los primeros en adquirir mi preventa, hoy gracias a mi barriga asquerosa y al esfuerzo de años en cerveza y punk rock podré estar como parte de lo que la banda californiana ofrecerá este próximo 4 de diciembre. Prometo tomar el alcohol necesario para estar a la altura de la expectativa. Guadalajara nuevamente se llenará de punk rock y será una noche especial, una noche que quedará en la memoria como otra tantas del underground tapatío.

Mientras tanto NOFX seguramente trae bajo el brazo éxitos del punk in drublic, so long and thanks for all the shoes, war on errorism, Ribbed, Heavy peating zoo, Coaster, Pum up the valium y así podríamos seguir enumerando placas emblemáticas de esta banda . Nos queda solo esperar al momento en que estos punks mañosos y gordos arranquen la locura nuevamente en Guadalajara, algunos dicen que por última vez, lo cierto es que es algo que no se puede dejar pasar a la ligera, lo único cierto es que NOFX está de vuelta!!


martes, 22 de septiembre de 2015

NOSTALGIA DE FUTBOL DESINTERESADO



El maestro Piña indicaba que el entrenamiento había terminado y corríamos a la esquina del campo, levantábamos la tapa de hierro y quedaba descubierta la toma de agua de donde se regaba la cancha de futbol principal del club Atlas Chapalita. Abríamos la manivela solo un poco y surgía un chorro tenue de agua para riego de campo de futbol. Así entonces en ordenada hilera nos arrodillábamos frente al pequeño chorro y poníamos los labios uno a uno en el chorro absorbiendo el líquido para refrescar garganta, pulmones y la cara completa después de más de dos horas de arduo entrenamiento. Bebimos esa agua por años y nunca nada nos pasó.

Los días de fin de semana primordial mente los sábados eran días de gloria y juego, de competencia y prueba. Yo solía poner junto a mi cama una especie de muñeco invisible hecho a base de las prendas que usaría a la mañana siguiente en el partido. Construía con mis adidas "Germania" de franjas plateadas, mis medias, espinilleras de barras cambiables, mi short y mi playera número 19 una versión sin cuerpo del que mañana jugaría la media cancha. La mañana siguiente sería fantástica y divertidísima y casi siempre victoriosa.

Sin embargo mi locura futbolística estaba más lejos aun de lo que el Atlas Chapalita y su agua de riego podían otorgarme. Yo comía, bebía, vivía el futbol. Quizás pueda poseer el record de horas gastadas en las calles y canchitas de la colonia Las águilas junto a otros tantos niños, entre otros mi difunto mejor amigo Enohc. Él y yo estábamos particularmente locos por el futbol y lo jugábamos a todas horas, en todas partes, con todas las cosas. Matábamos la luz del sol con gambetas, cabezazos, piruetas y penales, retábamos a cualquiera, sudábamos gloria y alegría entre carros y banquetas. Rompimos decenas de cristales, volamos balones al por mayor, huíamos de las señoras gritonas y saltamos cientos de veces las bardas más peligrosas.

Aun cayendo el sol el juego seguía en casa, convertí a mis Gi Joe, mis star wars, y mis playmobil en réplicas imaginarias de jugadores de época. Así Rud Gullit vestía uniforme de asalto, y Manuel Negrete era un playmobil negro con amarillo. Mis carritos no rodaban las pistas, pateaban canicas y se enfrentaban a los playmobil en partidos encarnizados con dos porterías que no eran otra cosa que una caja de zapatos cortada por la mitad. El futbol me perseguía a todas partes y curiosamente me aburría un poco el verlo en televisión,la magia real estaba en la cancha y el patear el balón.

Mi mejor compañero fue siempre un balón de futbol, siempre me escogían primero, mi padre estuvo siempre atento a que yo lo jugara mejor y con regaños y disciplina lo logró de a poco. Incluso recuerdo que con mi imaginación buscaba sitios donde poder anidar el balón aun sin tener un balón en los pies. En misa por ejemplo abandonaba la perorata del sacerdote, abandonaba el mundo e imaginaba el balón anidándose en el ángulo que hacía el confesionario con la barda del coro y metiendo un gol mágico. 

No voy a negar que jugué al futbol en los videojuegos, a mi me tocó el GOAL de Nintendo, un juego que hasta la fecha atesoro en mi cuarto de casado. Sin embargo el tiempo de juego era mucho mayor en la vida real, entre autos y piedras y banquetas y portones. Me deslicé mil veces con mis piernas debajo de los autos para sacar esos balones atorados. El mundo de mi niñez fue el futbol magnífico con héroes aun terrenales. Mi primer ídolo fue Manolo Negrete, después alabé a Maradona y a Platini. La selección alemana del 90 me sedujo y Klinsman y Mathews se adueñaron de mi corazón. Gullit y Van Basten hicieron lo propio con esa magia. Siboldi se convirtió en el primer futbolista de carne y hueso que vi y respeté como ídolo.
Hoy a más de 25 años después, veo a los niños de hoy que se reprimen las ganas de patear un balón con felicidad y buscan sitios perfectos con herramientas útiles como zapatos y un buen balón, un buen espacio, una buena cancha, buenos uniformes, buenos rivales, el mismo ídolo en la mente. Hace treinta años solo necesitábamos una pelota, y tiempo libre para imaginarnos en el mejor estadio y deshacernos las piernas y las rodillas la tarde entera. 

lunes, 27 de julio de 2015

TE ME FUISTE PIOJO



No se puede ser más torpe, no se puede ser más mecha corta, no se puede ser más imprudente. No se puede tener menor idea de un entorno y un puesto de trabajo y jactarse de ello con bríos y valentía absurda como la del Piojo Herrera. No se puede ser tan tozudo como "el colorado" ante todo lo que le rodea. No se puede ser tan inocente con tamaña responsabilidad en los bolsillos y en la cabeza como la tiene el aun director técnico nacional.

La mañana de hoy Miguel Herrera le puso una hermosa cereza a su aventura de Copa de Oro, la cual ya llevaba un guión espectacular y épico lleno de drama y sangre deportiva, de sudor y de gritos, de corrupción, de moral volátil, de Panameños alterados clamando cabezas concacafquianas, de Ticos incrédulos, de gabachos eliminados, de cubanos perdidos, y de millones de mexicanos que contra todos los pronósticos no se sentían tan capaces de apoyar a esta selección que a pedazos se desmoronaba en el colofón de esta copa.

Esta mañana cuando los mexicanos sobrios de vergüenza deportiva menonita apenas digeríamos y perdonábamos este grosero peregrinar de los ratones verdes por la Copa de Oro. Cuando se nos medio olvidaban los twits de las elecciones. Cuando las redes sociales nos incitaban al festejo mesurado, a la reflexión tajante sobre los muchachos que jugaron, a tratar de entenderles y como pareja sumisa aceptar la continuidad de los chicos y de su líder colorado el Piojo Herrera. A aceptar que los sonrientes campeones se pasearan enfrente de la prensa, cínicos y eufóricos y nosotros respaldarlos. Esta mañana que los mexicanos aceptaríamos ese cáliz de la nueva oportunidad. El Piojo Herrera en el aeropuerto de Filadelfia lo tiró todo por la borda como un niño tonto.

En un deporte y un país que sufre los estragos de la violencia y la intolerancia, llega un líder de mantequilla, entrenador de la selección mexicana de futbol acompañada de su hija "la corriente" (cuyo único mérito en la vida es ser amiga del chicharito e hija de el Piojo) y con violencia verbal y física agrede en público a su máximo detractor de la prensa; Perdóname Piojo (porque soy de los que le gusta tu equipo) pero no pudiste ser más torpe. Perdóname Piojo pero habías ganado la copa merecida o no, justa o no, la habías ganado, y tenías el sartén por el mango y ahora ya lo regalaste.

No puede venir el Piojo ahora a decir que lo hizo por defender a su hija. Dudo que la quiera como dice, si la quisiera así, se hubiera molestado en brindarle un tanto cuanto de educación, dignidad y humildad. Así que no puede venir el Piojo a unirse al cúmulo de líderes políticos y religiosos absurdos que nos pintan la cara con espejos. La única lectura que le doy a esto es que está enfermo de poder, contagiado por la infame niña que tiene por hija. Como dicen por ahí, sacó el cobre que siempre usó en la cancha cuando era el aguerrido defensor y que no supo guardar a la hora de usar la cabeza para pensar y no para romper narices.

En una sociedad que requiere de líderes propositivos e incluyentes lo menos que necesitamos son pelafustanes así señor Piojo Herrera. Si el reportero dijo o no la verdad, o si se siente usted atacado por ello, entonces mejor dedicarse a otra cosa para que no quede en duda su autoridad y manejos. Si le molesta que opinen de usted, entonces mejor apártese, váyase a trabajar al polo norte donde nadie pueda contradecirle y de favor llévese a su hija la de la boca de pulquería de los años setenta.

Si se va o se queda este señor, hoy firmó un capítulo en extremo risible para el futbol y la historia de este país. Me gustaba su futbol, me creí lo de los penales, había dejado de lado los insultos de su hija la corrientita. Pero este país no necesita más gente como él, que a la primer provocación pierde la cabeza, este país no necesita otro líder mentiroso que avienta la piedra y esconde la mano, este país se cansó de ti.

Y cuando deje la silla, la piojita se quedará sin amigos, ¿O apoco creen que sus amigos de la selección la seguirán buscando después de que ya no sea la hija del entrenador? Creo que le dejarán las palomitas azules en el whatsapp...

jueves, 9 de julio de 2015

UN SONIDO SATÁNICO DE EXPORTACIÓN




Una noche empezaron a sonar los bajos cumbieros de en un bar de esos que nunca voy pero que la marea me llevó. Al fondo del salón se refugiaban dos tipos tras sus computadoras y mezclaban las canciones a un ritmo de locura irracional lógica. De pronto apareció el merolico, el extravagante, el raro, el diferente y empezó a darle sentido a las mezclas y a mi manera de entender el show. Un presentador, un loco, un poeta callejero y sucio, mundano y prolijo en su retórica, sexual y contundente, una voz acuchillante que servía de aderezo picante a esa cumbia que flotaba en aquel bar. Era el Sonido Satanás lo que escuchaba.

Las cosas no suceden por añadidura; conocí la historia del Sonido Satanás y su gente trabajando con ellos y entiendo que el gusto por el Kitch y el entendimiento real de la vida nocturna tienen un solo desafío y es la creatividad de estos cinco personajes, y digo cinco porque tras ellos existe otro baluarte en la mística y el desarrollo de un fenómeno. Estos cinco granujas son tan distintos entre ellos pero los mantiene un común denominador tajante que es la fiesta, el baile y la poesía nocturna y el valor imaginativo. Pareciera que habitaran las calles de Guadalajara desde 1900.

Soy de los que creen que ya bailé lo que tenía que bailar, casi ya nunca bailo y soy de piernas huevonas y mano pesada para triturar mis nalgas toda la noche mientras veo a la gente bailar. Aún así disfruto de la algarabía popular y del sancocho de pistas de baile, aun así me recrea el ojo el sudor y las sonrisas del baile ajeno y sobre todo cuando se trata de cumbia y cadera ardiente que quema la duela, aun más si le cernimos locura y poesía a la pista.

Las mezclas de Pinpon y Newman tienen años rodando aquí y allá, por monedas, por refrescos, por tamales o por el simple gusto de hacer bailar y romper a la gente que brinda por cada noche. Ellos junto a otros tantos sonideros se encargan de darle sabor y tum, tum, tum, tum a los bares tapatíos y zapopanos. Cargan con la tremenda loza ardiente de ser Djs y lidiar con ello con los incógnitos ebrios de bar, o con las chicas expertas en saber que canción sigue como si ellos fuesen solo reproductores portátiles con pies y manos y que hacen caca.

La variante magnífica del Sonido Satanás como con otros sonideros desde mi punto de vista, tiene que ver con la magia del momento evocada por la poesía arrabal y sexual de Groncho combinada con una buena selección de temas propios y sancochados, y la inocencia satánica de Ricardo quien en silencio y escondido tras un descomunal bigote rompe las reglas de la pista. Desde mi punto de vista es una armonía cuasi perfecta de un retrato social mexicano y su cultura underground de asfalto y cabaret. 

Este retrato cultural ya tuvo un premio satánico y los llevó a pisar tierras europeas. Suena tan estupendo como lo que es. Muchos proyectos tapatíos han cruzado el charco pero pocos con semejante alcurnia y fluidez. Y a mi por lo menos me llena demasiado saber que estos muchachos que radican en su mayoría en Santa Tere, o por lo menos ahí aterrizan su satánico saborío, hayan demostrado al viejo continente la alegría de nuestro sentir y la locura de nuestro vivir.

Hoy en día los sonideros abundan por aquí y por allá, siendo los más arriesgados y los más elocuentes quienes alcanzan a distinguir. El camino del Sonido Satanás tiene miles de horas de sudor y baile y borrachera empedernida, litros de cerveza derramada, mezcal afrodisíaco, y noches y madrugadas acumuladas entre cables y computadoras y micrófonos enmielados de fiesta y sudor nocturno. Esta armonía de fiesta e ideas, de sueños y de un inmenso amor a Santa Tere los llevó ya a cruzar el charco a Europa y a calentar las pistas de nuestro país. 

El Sonido Satanás es un puñado de cultura nocturna tapatía en las cabezas y sangre de cinco tipos tan distintos y al mismo tiempo muy afines. Es la radiografía de la noche y la expresión de los que callan y solo sudan en la pista de baile. El Sonido Satanás es una invitación a la locura y la perdición entre alcohol y ese zumbar constante de los zapatos rechinando al suelo y la poesía y la demencia comunal. Enhorabuena a los embajadores de nuestra fiesta en el mundo! 

martes, 7 de julio de 2015

ESTRELLAS QUE NO LOGRAN BRILLAR




Se cagan en críticas encima de Messi y de la Argentina, encima de Brasil y de Neymar, se cagan encima de todos e ignoran que el futbol está cambiando a puños. Y nos venden ídolos que no se acercan a lo que nosotros antes conocíamos como tales, nos hacen creer que las grandes figuras argentinas y brasileñas lo son por el simple hecho de romperla medianamente en Boca o River o Corinthians o Cruzeiro y luego vuelan por millones al viejo continente a arroparse la mayoría en equipos de estrellas mundiales para convertirse aun más en íconos y referentes, cuando no son más que buenos quizás buenísimos jugadores de futbol pero están lejos de ser los ídolos y las estrellas resuelve campeonatos y juegos que creemos.

Se critica a Messi por no haber ganado la Copa América y por tantas cosas pero es que no nos damos cuenta de la real problemática. Las estrellas brasileñas y argentinas de hoy no son del tamaño que creemos y son diminutos comparados con los que les antecedieron. Messi y Neymar por supuesto cuecen aparte pero yo insisto, se creó una masa de talentos a destajo sudamericano que el mismo futbol argentino y brasileño ya no pueden sostener en ocasiones y están importando ahora jugadores y repatriando talento local consagrado.

Tenemos el caso de Higuaín, un tipo que juega maravilloso que la rompió a medias lleno de estrellas en el Real Madrid, un equipo donde mi abuelita metería goles si viviera. Higuaín hoy está recibiendo todas las críticas no solo por fallar en esta Copa América sino que ahora le vuelven a recordar la de la final de Brasil 2014. Y yo me pregunto...¿Kempes habría fallado esas pelotas? ¿Lo habría hecho Canigia? ¿Qué tal Maradona? ¿O Batistuta? Históricamente no fue así, aparecieron en el momento justo y libraron esas batallas y le dieron los títulos a su país, y eso justamente les dio la inmortalidad postuma. Y déjenme recordarles que estos tipos no jugaron en equipos galácticos y aun así brillaron y tienen casi casi las llaves de las ciudades que habitaron como lo hizo Batistuta en Fiorentina, o Maradona en Nápoles (donde Higuaín por cierto volvió a errar en momentos críticos) o Kempes en Valencia etcétera.

Culpan a Messi y a Higuaín y se olvidan de Lavezzi que entró a pasearse como estrella del futbol y refugiarse en la marca del chileno desconocido todo el partido, y cuando Messi tiempista y genio le pone una pelota para que sirva a Higuaín o saque de su chistera una genialidad de esas que deben tener las estrellas del futbol moderno, ¡pum! un pasé al Pipa que más bien parecía al palo y por el que el Pipa hoy sufre en comparaciones con Batigol quien logró años antes una igual. 

Y qué me dicen de los astros brasileños que triunfan en el Chelsea o el PSG o el Bayern o el Madrid y bla bla bla, Pero que a la hora de ser héroes y figuras entre ellos chocan como pinos de boliche sin sentido. Y Neymar saca su ímpetu genioso y llora y reclama y grita y provoca como nunca vimos a los brasileños. Un nuevo caso de estrellas opacas que nos quieren vender a la fuerza para sustituir a Ronaldo o a Romario o a tantos brasileños que hacían clubes campeones con su magia.

Hoy en día hay miles de argentinos y brasileños distribuidos por todo el mundo, la mayoría de ellos ocupan el sitio de estrellas y jugadores clave en cada plantel, al final de cada temporada todos los clubes del mundo nos acercamos a las ligas argentinas y brasileñas a preguntar por los exitosos de esta temporada y pagar fuertes sumas por traerlos acá como estrellas solucionadoras. Cada vez el talento es más escaso, es imposible producir jugadores estrellas a destajo como hoy se cree.

Y entonces llega el mundial o la Copa América y decimos que estos equipos están plagados de estrellas y deberían serlo por supuesto si se considera que son los 22 mejores entre los miles y miles. Sin embargo si se es analítico y se deja el morbo de lado se puede notar que Biglia y Otamendi están a millones de años luz de Ruggieri, o de Mcallister, o de Ayala, o que Banega no es ni la mínima parte de lo que fue Redondo o Passarella y si nos vemos más críticos recordamos a Sergio Goicoechea quien cuando Argentina no podía resolver en 90 minutos y alargue se ocupaba de todo y daba los títulos y las rondas y donde Romero se ha quedado lejos.

El futbol actual es muy parejo, se ha vuelto más físico y trabado. Los equipos chicos se dieron cuenta que revolver al equipo atrás 90 minutos sin buscar nada puede traer empates valiosos o triunfos absurdos. Exigimos a las potencias latinoamericanas como Brasil y Argentina salir y arrasar con todo pero ya es tan sencillo como antes. Hoy Chile demostró que con ganas y orden se pueden hacer muchas cosas, cosa que muchos deberían aprender de ellos.

Se acuchilla a Neymar y a Messi sin duda dos estrellas que pasarán a la historia. Se acuchilla a los planteles completos de estos equipos, a los técnicos se les cuestiona y se les juzga. Yo solo creo que es tiempo de dejar de creer en estrellas tan pero tan sobrevaloradas y volver a la antigua creencia de que los millones no hacen necesariamente goles.

martes, 16 de junio de 2015

CALIGARIS A OCHO AÑOS DE DISTANCIA




¿Quién carajos son los Caligaris?  Fue mi primera respuesta cuando nos invitaron a telonear su primer show en Guadalajara, creo que habrá sido el 2007. Cumplimos la fecha apenas bien, la empresa perdió, con ellos cruzamos un par de palabras y listo. Nada memorable realmente, sin embargo se había prendido una mecha silente.

Un año después sonó mi teléfono nuevamente un tipo me pedía de urgencia albergar a trece argentinos entre músicos, staffs y manager en mi casa por dos semanas. Refuté inmediato dado que mi departamento en ese entonces lo compartía con Julio y no había sitio para trece argentinos, era imposible. Sin embargo no había más opción y acepté pensando que yo algún día quizás necesitaría lo mismo. Esos argentinos eran Los Caligaris.

Así llegaron doce sujetos y un manager enojón y se apropiaron de todo el suelo de casa, el primero que me saludó un tal sencillez me saluda de beso, estaban organizados hasta las pelotas, dos que hacían la prensa diaria, otros dos más que preparaban la comida, uno más que iba y venía consiguiendo los pormenores del show circense. Otros tres más que ajustaban la mínima cuerda para el show, otros que contaban discos y camisas entre cajas y bolsas esperando el inicio de la gira mexicana. 
Dos días más tarde la fatalidad... el tipo que organizó la primer parte de la gira resultó un engaño y habría que esperar mas de una semana en silencio.

La siguiente semana fue una locura total, apenas recuerdo y se me estruja el hígado, casi no dormí, combiné trabajo y fiesta absoluta, mi departamento se convirtió en fiesta todos los días. Mi comida era resuelta por el gordo Marcos día a día. Era ese gordo cariñoso quien todas las mañanas me deseaba buen día y me preguntaba a que hora llegaba a comer mientras yo esquivaba caligaris entre los colchones regados por todo el departamento. Valentín el que menos dormía, tenía su colchón en la cocina y era difícil abrir el refrigerador para completar la faena matutina.

De noche, era usual que "Sencillez" siempre en calzoncillos me visitara y me despertara porque no podía dormir y me platicara cuando extrañaba Argentina. Por las tardes siempre comíamos todos juntos entre colchones e instrumentos y maletas. Los "cases" la hacían de mesas y parecíamos refugiados de alguna guerra con las sonrisas siempre al frente. Comí pasta a morir, comí Poroto, comí Panchos, comí el asado más distinto que he comido en mi vida, después claro de lograr que en el Soriana nos vendieran media res casi para alimentar a los caligaris, No tiene la v
aca y unas decenas más de amigos.

Se llegó entonces el momento de atender la parte de la gira que si estaba sentenciada, además de un endiablado Festival Extremo hicimos un show doble en un lugar cercano a plaza del sol, con doble función de menores y mayores el lugar inexplicablemente se llenó a full, la tocada fue una locura total, para el final de la misma yo estaba en uno de los costados entendiendo apenas el fenómeno que ya detonaba. Se llegó "Kilómetros" y asaltamos eufóricos el escenario yo y otros cuantos amigos del barrio, para el encore final nos quitamos las playeras y las agitamos con locura, no se si fue la primera vez que se hizo eso, casi estoy seguro que si, fue la gran despedida de Guadalajara.

El resto de la gira de No tiene la vaca y Caligaris fue pura alegría, anécdotas maravillosas, y amistades que jamás se van a olvidar. Incluso estuvimos a punto de morir todos entre el camino de San Luis Potosí y Monterrey en una curva maldita con aceite y lluvia que quisieron apagar la vela de nuestra alegría y no lo consiguieron. Me recuerdo sentado en medio del pasillo y ver al frente como el camión giraba de un lado al otro queriendo encontrar fatalidad o suspiro. Afortunadamente el camión logró acomodarse y solo fue un motivo aun más para sonreír a la mañana siguiente con una cerveza de desayuno.

Han pasado ya ocho años desde aquella llamada telefónica en que me ofrecieron telonearlos cuando no tenía ni puta idea de quienes eran. Todos saben lo que estos argentinos han logrado en el corazón y el ánimo de los mexicanos, para ser honesto me gustan muchos de sus temas pero yo no podría ser el mejor fan de su música, yo soy más punk. Sin embargo se que han trabajado fuerte, que han sufrido, que no todo ha sido siempre alegría y emociones, hay miles de sensaciones detrás de toda esa maraña de éxtasis actual. 
Está de más escribir acerca de su música y su éxito porque todos lo saben, hace unos días pude platicar con algunos de ellos nuevamente, ya no en el depa, ya no en la calle, ya no en calzones. Siguen siendo los mismos argentinos que llegaron hace ocho años a mi depa, los mismos que saludan de beso, los mismos ahora con hijos, los mismos que tomamos un shot de Listerine para finalizar una peda, los mismos locos que tiraban colchones y dormían entre pedos y ronquidos en la sala de mi casa. Los mismos cordobeses culiaos!!

jueves, 4 de junio de 2015

UN GOBIERNO QUE TENGA HUEVOS


Yo solo quiero:

Un gobierno que saque a los miles de parásitos de sus oficinas y puestos
Un gobierno que me cobre lo justo y me deje trabajar
Uno que permita la competencia y aborrezca las concesiones
Un gobierno que se olvide de lo represivo
Quiero un gobierno que logre que a mi amiga a la que estimo le cancelen su cheque de maestra sin ejercer el cual obtiene por su marido dirigente
Un gobierno que le suspenda el cheque a mis conocidos aviadores
Uno que le pague a los artistas lo que se merecen
Un gobierno que le audite de verdad el dinero a todos los supuestos organizadores y promotores que solo iinflan facturas de servicio
Quiero un gobierno que no reprima y que dialogue
Un gobierno que acabe con miles de puestos inservibles
Un gobierno que otorgue competencia real a los prestadores de servicio y termine con los compadrismos
Uno que le regale las calles a los jóvenes
Un gobierno que castigue a los que operan mal y no solamente a los nuevos emprendedores
Un gobierno con diálogo permanente
Un gobierno de ideas y no otro estancado y aburrido

Necesitamos gobiernos que limpien de fondo el lastre que durante años tenemos aun deteriorando nuestras instituciones y por consiguiente nuestro futuro. No habrá y no existirá un candidato perfecto hasta que alguien se atreva a desafiar hasta el último resquicio de lo que hoy nos gobierna para limpiar la podredumbre.

Han pasado diferentes partidos pero mi amiga sigue cobrando su cheque de maestra sin dar clases, el jefe de mi amigo que nunca ha visto sigue cobrando su  cheque sin pararse a oficina. Y siguen y siguen vivas las rémoras de los presupuestos.

No pido mejoras físicas como agua, calles dignas, seguridad y demás porque eso es su mayor obligación.

Sin embargo sueño con un gobierno que simplemente tenga los HUEVOS para cambiarlo todo, por encima de los de siempre.

martes, 28 de abril de 2015

ANDRÉS ANDRÉS



Yo te vi jugar Andrés, salías con tu melena de puberto que aun conservas y hacías sprints de lado a lado y después te divertías en la banda izquierda con defensores y compañeros. Rápidamente adoptaste esa banda izquierda del Jalisco como un refugio sabatino a tus patadas y gambetas, y yo y muchos dibujábamos tu número 17 en el ceño y sonreíamos y gritábamos y empujábamos tus piernas y el balón para apedrear a los arqueros rivales. Yo me emocionaba mucho al verte y entenderte con mi equipo.

Yo te vi despedirte, ofrendaste quince minutos ante la gente que te vio nacer y te veía partir, te fuiste como pocos se han ido, no solo por la puerta de enfrente, con honores y almidones, con gritos y cantos y lágrimas que se quedaron derramadas en la grama y las tribunas de mi adorado Jalisco. Te vimos partir como un caballero, nos hablaste de frente, aventaste gracias y respeto y te juramos y nos juramos lealtad. Nadie se ha ido de este club con tanta gloria en tan poco tiempo. El mundo te tenía preparado otro plan.

Aun recuerdo como se me tiritaban las manos cuando te vi prepararte para saltar a la cancha en aquel mundial de Alemania, eras el arma secreta del bigotón y cumpliste y los halagos volaron a pesar de la lesión y la eliminación. Sin conocerte fuiste el remedo de consolación de ese domingo atroz de 2006, aun recuerdo como ayer esa tarde fría inconsolable. Aun recuerdo al mequetrefe de Javier Aguirre anularte en 2010 y ponerte a cuentagotas en Sudáfrica y metiéndote para que le solucionaras los momentos que sus predilectos no supieron acomodar.

Europa no te fue fácil pero te lo tomaste muy en serio, y volviste a penetrar con picardía la banda izquierda tan tuya por aquí y por allá. Acá era difícil seguirte pero lo intentábamos siempre. Sabíamos que los músculos te explotaban, te empezaron a llamar de cristal, de papel...¿qué saben ellos? Aun así volviste a caminar y correr y patear los estadios de la primera española y te importó un comino tragar segunda división, eres un tipo fiel, eres lo que mi club te dio desde el principio, eres un agradecido con la vida y con la gente.

Parece que la gente de Holanda ya vio lo mismo que yo vi en ti en aquellos años mozos de carreritas rojinegras, de inmediato te escabulliste en sus corazones con esa pegada y esa fidelidad y gratitud de perro. Holanda olvidó el No era penal y el "puto" y lo cambió por el cielito lindo con tu nombre, llenaste de nuestro español las gradas del PSV, las pintaste de verde blanco y rojo. Nunca he sido nacionalista, pero se me cayeron las de cocodrilo cuando vi ese mosaico con esa manta a tu nombre, pidiendo tu zurda y tu sonrisa más tiempo. Muchos nunca entenderán el tamaño de tal honor de una hinchada hacia un jugador. Nunca lo vi por un mexicano antes, si por muy pocos grandes ídolos.

Apuesto a que aun no sabes que sucedió o que hiciste realmente para recibir tal detalle, tal distinción. Apuesto que tardas en asimilar tal dicha y honor que una ciudad y una afición te han concedido como lo intentamos nosotros hace algunos años. Me quedo con este momento, me quedo con los buenos recuerdos y añoro que los nuevos sean iguales o mejores. Ya eres campeón, nosotros aun no y quizá nunca lo seamos, realmente me tiene sin cuidado, igual pienso sufrirlo. Algún día nos encontraremos de vuelta en la cancha del Jalisco, ya sea como nuestro o como rival, o como el jugador retirado qué se yo...

Hasta entonces me quedo con el mosaico, y con tu 17 en el dorso adornando el bello estadio Jalisco...

lunes, 23 de marzo de 2015

¿Y TU YA VISTE A LOS THERMO?


Hace tres años se bajó el telón de la vejez, el hartazgo y la estúpida madurez, hace tres años se vino encima el peso del orgullo y la terca voluntad de escapar hacia los sitios donde los zapatos se aterrizan y olvidar donde las manos escriben sueños. Hace tres años que Thermo dejó los escenarios sin decir un adiós que nos dijera una sentencia verdadera, partieron con una maraña de dudas y de voces encontradas, de kilómetros y de silencios y souvenirs aun ardientes. Thermo se refugiaría en dos sedes: Guadalajara y México, Sueños y Realidades, y un mar de dudas y palabras que necesitarían casi los tres años para tomar un orden y enmendar las esperanzas comunes.

Apenas recuerdo el cabello de Roy en los noventas, pagaría por haber tomado una foto de esos días. Thermo se iniciaba el camino y escogían la vereda complicada para andar. Mientras todas bandas seguían la estúpida nostálgica corriente Bunburyesca, Caifanesca y Sodastereodinamica... o el ska se desparramaba a montones, ellos caminaron de la mano de las bandas de Punk sin siquiera ser tan punks. Thermo era una bocanada de rock entre punk, entre pop, entre grunge que no sería tan fácil acomodar en ningún show. En sus presentaciones iniciales los aplausos de respeto cariño e ingenuidad eran la costumbre.

Sin embargo ellos lo tenían muy claro y era abastecerse a ellos mismos con cada nota, adictos a la disciplina se alejaban de las costumbres normales de banda de rock y rechazaban el trago y el trasnochar. Consumían acordes y técnicas y reptaban en sus instrumentos y sus anhelos con un único objetivo: La música. Thermo se cansaba de a poco de esperar algo que Guadalajara nunca le iba a dar porque Guadalajara simplemente no es así. Thermo se desprendía de a poco de esta ciudad y adoptaría otras tantas para por fin explotar.

En el Dance Core EP de principios del siglo que vivimos, me invitaron a cantar una canción con ellos, la sesión en el casón de Santa Tere fue una gran experiencia. El cuarto de escasos dos metros cuadrados, las paredes blancas con telas viejas como cuarto de manicomio, las guitarras torpedeando mis oídos serán difíciles de olvidar. Aun escucho ese track que quedó en el olvido y con orgullo se lo grito al más cercano como si fuesen zapatos nuevos. Sin darme cuenta Thermo me ayudó a entender el otro lado de la música y del negocio.

Y sin más ni más los vi crecer a pasos agigantados, mientras todos los demás hacíamos intentos alocados su estrategia era por mucho más firme y más fuerte. Aquí y allá sonaba el Thermo y las miradas extrañas del público se convirtieron en turbosina potente que los hizo volar hasta Suecia para poder entender entonces que el rock no tiene límites. Y algunos estúpidos medios tapatíos jamás se enteraron de eso, ¿que más da? Acá estamos más preocupados en que piensan Sara Valenzuela y José Fors y compañía de los nuevos talentos impuestos.

Thermo logró lo que pocos, se comió el país de a poco, superó a la Guadalajara expectante, se alimentó de puntos estratégicos y se volcó abruptamente sobre el rock nacional. Lograron convertir sus inquietudes musicales de años en placas excitantes y ahora netamente valuadas y valoradas. Sin embargo la edad y los caminos se sedujeron por las dudas y Thermo se echó a dormir.

A casi tres años, recibo a principios del 2015 la llamada de Mike y de Iván y me comunican lo que los chismosos ya imaginaban. Thermo regresaría a los escenarios... Por dinero, por pasión, por terquedad, por sus huevos o por lo que quieran estos tapatíos de acero y lágrimas regresan. Aun los medios de Guadalajara siguen pendientes por saber de que color hará caca hoy José Fors como siempre pero los que sabemos y conocemos todo lo que Guadalajara ofrece y exporta al país lo celebramos. Una de nuestras mejores bandas está de vuelta y eso será un agasajo de madurez musical, ahora los chicos usan barbas enormes y las bañan con mezcal y cerveza, ahora piensan en trasnochar pero también en opinar y merecer.

Podrás decir lo que quieras de Thermo, ellos escucharon de todo en más de 15 años, positiva y negativamente, yo hoy solo puedo decir que es un placer tenerlos de vuelta y no importa realmente por cuanto tiempo sea. Viejos, Feos y Testarudos están de vuelta... ¿tú ya los viste?

viernes, 6 de marzo de 2015

ENTRE LOCOS GDL Y OCOTLÁN



Hace varios años estaba sentado en una silla estúpida de plástico en una noche fría y de hueva, en un concierto bastante apagado cuando vi a un perfecto Nerd subir al escenario y sentarse en una silla a cantar canciones de cuatrero loco. El tipo hacia diferencia con el elenco antes presentado, me gustó su seguridad y su simpleza, su sentido del humor y sobre todo la visión lírica de sus temas, llenos de amor, venganza y mucha naturaleza. Se presentó como José Miel y lo contraté para mi banda de folk punk HUGO.

Descubrí con la amistad de este tipo que no era más que un cuatrero, un ranchero inmerso en las garras de una sociedad perturbadora. Nos ahogamos en alcohol y en música. Creamos varias cosas juntos intentando sumar mi Colonia Las águilas con su Ocotlán querido y otras tantas visiones de esta ciudad. Entendí que una cabeza puede estar perdida dentro millones de sensaciones, y volar en sueños humanos y fraternales relaciones de sueños locos.

Este tipo me hizo entender que la música lo está por encima de todo, que no se necesita de un género específico para bailar, entendí la pureza del baile y la locura juntos en el escenario. Como una cápsula de adrenalina en un plato de pozole hirviendo, se cocían los pies arriba y abajo, las guitarras se despatarraban por segundos y los gritos y silbidos llamando a las vacas o a la vida para una noche perfecta. José Miel me hizo sentir que la música era para perfectos locos.

Lo regañé por desdeñar su pasado, le recordé que antes había hecho temas increibles con Remmy, su banda, su hijo, su pedazo de campo en este monstruo de ciudad. Remmy es la banda que vive de los sueños y las alegrías y locuras de este tipo y sus secuaces. Remmy es el estrecho de Bering entre Guadalajara y Ocotlán, Remmy es una cartón animado como lo fue en los ochenta, solo que esta vez sin lágrimas, pura felicidad y baile.

Me tocó ser parte de su segunda placa "Annie y la manzana verde", una hermosa obra que conjuga los colores y los matices de una banda que se quería refugiar en pedacitos de historias tiernas y aterradoras. Un juego de luz y de sombra, de personajes y ficción concentrados en la mente insaciable de los Remmy. Una placa que necesariamente debería ser más reconocida en el mundo, para mostrar la belleza de su recorrido entre Ocotlán y Guadalajara, estoy seguro que ese lugar de sueños debe existir en algún punto entre estas dos ciudades.

Ahora nos están regalando su nueva placa "Animalario", recordando un poco el trabajo de Arreola y su reflejar en animales las condiciones humanas. O como lo hizo La polla records con "Donde se habla" que con animales nuevamente construye los errores humanos y sus perversiones. Así entonces animalario se aleja de los colores y se alberga en especies distintas para demostrarnos nuevamente las locuras de los Remmy y su andar por esta ciudad y su nostálgica Ocotlán. Animalario entonces es donde los animales se convierten en humanos sentimientos y duermen en cantinas y botellas de vodka, donde residen los pecados y las virtudes de los humanos, donde las guitarras se hacen monstruos y las teclas insectos y las voces garras e instintos.

De Remmy te puedo contar mil cosas, que han tocado en un camión andando, que han tocado aquí y allá, utilizando este u otro instrumento, que han desafiado todo para cumplir sueños y locuras. Te puedo contar que sus tres placas han dejado algo profundo en mi sentir por la música. Si las bandas de Guadalajara tuviéramos la mitad de locura de lo que Remmy esconde detrás de sus cinco integrantes otras cosas sonarían y atacarán la ciudad. Necesitamos más locos en este mundo, el mundo es de los locos, el mundo es de los que piensan diferente y arriesgan hasta los calzones.

Mientras tanto hay un Animalario que te espera, para conectar ese mundo expectante entre Guadalajara maldito y Ocotlán ardiente. 


jueves, 5 de febrero de 2015

SUPLENTES MILLONARIOS



Las uñas de las manos se convierten en las víctimas de los nervios y la duda, los tachones brincotean y bailan el tap de la desesperación y las ganas, los músculos van y vienen en temperaturas distintas, se contraen, se estiran, se aflojan, brillan embalsamados y listos. Las agujetas como orejas caen y se arrastran, las espinilleras sudan y lloran desesperadas por recibir acción dentro del campo. Las manos sudan y los ojos buscan respuestas en el monstruo de mil cabezas que sigue el partido, buscan minutos entre los dientes de los técnicos aferrados, buscan un sitio dentro del sueño del sueño.

Así viven algunos futbolistas mexicanos en los banquillos europeos, así se les caen a pedazos las ilusiones de cada fin de semana, intercambiando playeras secas por sudadas, magnificando conversaciones de gatorade y powerdrinks entre risas coquetas en idiomas fríos y no tan conocidos. Es el mundo de la banca, el mundo del olvido y la desesperación, de la fama y la burla, el mundo de la línea del ya merito, donde se cuecen estrategias y mercadotecnias, donde las risas nerviosas y los saludos firmes a las cámaras de televisión son el día a día. El mundo donde rascarse un huevo puede ser más interesante que un balón dividido o una gambeta contundente.

¿Será que de verdad somos inferiores? ¿Será que los petardos africanos y sudamericanos de verdad se plantan mejor en la cancha que nuestros ídolos de maíz y tequila? Lo cierto es que las nalgas mexicanas están hechas para calentar banquillos europeos por aquí y por allá. Nos hemos vuelto expertos en soñar en nuevas grandes historias como las que el Pentapichichi logró en los ochentas y que un aguerrido y siempre presente Chicharito quiso empezar hasta que se le apagó la magia y volvió a las mismas instancias de observación metódica y millonaria suplencia.

Y entonces los millones de dolares se vuelven transparentes y se anidan en las cuentas bancarias, y mes con mes se cubren las cuotas y se cuelgan logros y triunfos y palmarés intransigente. El dinero y la trayectoria y la experiencia no se detienen y nuestros ídolos entonces se encuentran entre la disyuntiva de llorar el abandono o gozar el descanso millonario. Saben que volverán a México algún día y se colgarán triunfantes otros millones para vestir camisetas que nunca amaron que nunca soñaron.

El sueño de cualquiera pudiera ser recibir dinero sin trabajar, sin embargo, estos jugadores sufren la ausencia de trabajo aun cuando sigan recibiendo su cheque millonario y poder comprar ropa idiota como casi todos los futbolistas. Para ellos el sufrimiento millonario desde la banca pesa más al buscar respuestas y justificaciones a la prensa, o a papá o a mamá, o a la rubia de tetas grandes que se revientan las noches después del juego sin sudor. El dinero entonces no resuelve la tristeza de sentarse noventa minutos a ver el sueño europeo caerse a pedazos.

Nuestros héroes nacionales se han deleitado de banca en los últimos años, hay algunos casos de éxito, pero no hay leyendas nuevas, no hay insaciables ni incansables ni eruditos del balón. La banca les mutila sus carreras más no sus millones, les pone en evidencia ante un incrédulo y soñador pueblo mexicano. Hay trabajo, hay disciplina, hay salarios reducidos y aun así no se logran las expectativas. Hoy nuestro delantero estrella Chicharito se ha quedado seis meses más a préstamo para acariciar la banca del club más poderoso del mundo. Hoy nuestro héroe del marco Ochoa, mira los partidos del Malaga desde un sitio confortable, mascando el chicle la cara orgullosa y el sentir maniatado. 

Hoy, sin embargo los ridículos millones, siguen sonando la caja registradora.


martes, 27 de enero de 2015

3 MINUTOS CON JOEY CAPE


Y entonces esperando paciente por tirar una meada se acerca Joey Cape para hacer lo mismo antes de subir al escenario así que le cedo mi lugar de espera. Aun así hay alguien adentro del baño, y súbitamente ahí estábamos juntos con un mismo objetivo, Joey Cape y yo esperando tirar el agua de riñón y yo solo deseo que el tipo de adentro tire la meada más larga de su vida para poder tener minutos de charla con Joey.

En dos segundos estoy dispuesto a convertirme en gropie desenfrenada y atiborrar de elogios a mi héroe noventero, pero solo atino a decir alguna pendejada en inglés machucado y Joey saca su voz normal de chabelo fuera del personaje y asiente a mi balbuceo. Lo escucho hablar lento y con voz muy gruesa y me recuerda a mi entonces porque octavamos al cantar. También comparo su estatura con la mia y veo que somos muy parecidos, me siento tranquilo y seguimos esperando la meada.

Quise decirle que siempre fue un enorme problema tener un disco de ellos en original y teníamos que pedirlo a las tiendas como seres extraños y amorfos ante la ignorancia de tal género, quise platicarle que entonces teníamos que quemar sus discos o comprarlos quemados y escucharlos en los discman y las grabadoras de poder digital, teniendo que renovar constantemente ante el desgaste natural. Aquellos discos compañeros que aun se forman en anaqueles y se esconden en los nuevos formatos Mp3 que trajeron la modernidad.

Intenté comentarle a Joey sobre mis temas favoritos, explicarle como el Hoss cambió mucha de mi percepción de la música punkrocker, una transformación y valoración del género que viví en esa época, una suculenta y atractiva nueva forma de vivir el punk rock, riffs armoniosos y letras más cercanas a mi realidad tangible como nuevo adolescente apenas desvirgado. Quise decirle que la terrible portada de Lets talk about feellings, siempre estará en mi mente y que ese disco marcó mis viajes en el tren ligero la universidad, creando una burbuja de punk rock ante las miradas silentes. 

Ahí estábamos juntos con la presión de la orina, el tipo se notaba tranquilo, los nervios de los shows ya no son nada, adentro más de quinientas almas eran el cúmulo de una nostálgica espera que llevó años. Era la invasión de chavorucos que inundó el foro y que tenía en Joey al electo unánime maestro de ceremonias, director de orquesta. Él no lo sabía mientras esperaba su turno para mear pero estaban llegando a su fin años de espera de un gran personaje.

Quise también reclamarle como era posible tanta ausencia siendo de una ciudad tan cercana a este país, reclamar esa estúpida y equívoca evasión de los escenarios mexicanos. Solo somos jóvenes inmersos en una sociedad que no acoge nuestros gustos distintos e insiste en ofrecernos espectáculos hirientes de talento. Tal vez la culpa sea nuestra y ese desatino sea una simple consecuencia de la cultura musical que nuestro país adopta.

Salió del baño el ocupante anterior, y Joey con su mano derecha y su voz gruesa me indica que puedo entrar antes que él si así lo quiero respetando mi turno. Le cedo el espacio con gusto sabiendo que el show solo espera a que tiré su pipi y se largue al escenario. Antes, en mi inglés de borracho de fin de semana y después de esos minutos solo le agradezco por estar en México y hacernos a esta generación tan feliz por su visita. Con una mirada profunda y sencilla y su mano en mi hombro me dice: "Es un placer, ustedes los mexicanos son increibles"

Siempre quise conocer a Joey Cape